Empezaba a escribir un mensaje para despedir el 2020 y lo único que pasaba por mi mente era en darle una buena patada al 2020 y mandarlo bien largo. Literalmente soplé fuerte para sacar todos mis malos pensamientos y agarrar fuerza para empezar el año, como dicen sacar “EL FUA”.

Ya más tranquila me di cuenta de que la patada es solo para “el bicho” porque el año 2020 si me deja muchas cosas buenas. Me permitió tener tiempo para estudiar, para ser creativa, para reinventarme. Me permitió descubrir debilidades y fortalezas en mí y en mis allegados. Me permitió poner atención a lo que realmente es importante. Me permitió darme cuenta de cómo perdemos oportunidades porque teníamos todo a la mano y no necesitábamos crear, inventar, conocer, redescubrir.

El 2020 estuvo lleno de solidaridad, aplausos en los balcones en reconocimiento a la labor de los que siempre fueron héroes invisibles, muchas organizaciones llevando desde canastas básicas hasta ayuda psicológica, familias incondicionales compartiendo y ayudando al que le faltaba.

Además, espero que a todos les haya dejado muchas enseñanzas, el valorar más la salud y el trabajo, el cuidar mejor de nuestros mayores, el dar importancia al ahorro, la apreciación por la libertad y la naturaleza. Lo importante de tener comunicación con los que amamos y que la buena convivencia en nuestros hogares es algo esencial.
Guardemos todas las enseñanzas, no nos olvidemos de este 2020 tan difícil, recibamos un 2021 resistiendo para lo que aún falta con mucha fe y esperanza. Pronto podremos viajar y ver sin pantallas de por medio, a los que no vamos a querer soltar, dar esos abrazos y besos tan deseados,

¡Este 2021 disfrutemos de la vida, hagamos lo que más nos apasiona, atrevámonos a ser más bondadosos y sonreír constantemente, elijamos ser felices!
¡Mi deseo es que este año que comienza lleve a cada uno de sus hogares mucha salud, trabajo y prosperidad!